2 de febrero, nieva, mucho.
ayer tuve un percance con la chimenea de la estufa y hoy he tenido que limpiarla
mientras caían copos y alguno se deslizaba por mi espalda.
la nieve es muy bonita en el imaginario pero muy incómoda si tienes que seguir haciendo tu vida.
me alegro de no tener necesidad de salir.
C estaría encantada, lo que más amaba en el mundo era la nieve, quedarse aislada y los animales.
hoy sería la víspera de su cumpleaños y ya hace casi nueve años de su muerte,
sigo echándola de menos.
horneo una especie de empanada sui generis, lleva mostaza, remolacha asada, queso y pastrami.
me encanta el pastrami y prepararlo, yo que soy cuasi vegetariana.
pero está tan rico, tan especiado y ahumado.
las estufas están encendidas, la casa cálida a pesar del frío.
me encantan los fuegos, las estufas, la leña.
cuando vuelvo a la ciudad me doy cuenta de que mi ropa huele a humo,
aquí no lo noto.
bebo vino, escribo, sigue nevando, 2 de febrero.
2 comentarios:
Qué cálido y qué bonito leerte.
Un saludo de febrero.
la nieve es preciosa en las postales y desde una casa con la calefacción a tope ;)
pero me gusta ese silencio tan especial que da la nieve, esa sensación de perder los puntos de referencia...
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