14.5.07
Lo perdido
Harás tu vida y yo la mía
y cada cosa volverá a encontrar un sitio:
las manos a las manos, la boca al oído, el tiempo al tiempo.
Pero lo que no era ni del uno ni del otro,
la moneda que hundimos en el agua,
el jardín nocturno,
los nombres secretos de cariño,
las mañanas de pan tierno y arroz a la cubana,
como un fantasma vagarán por el mundo
sin encontrar reposo.
y cada cosa volverá a encontrar un sitio:
las manos a las manos, la boca al oído, el tiempo al tiempo.
Pero lo que no era ni del uno ni del otro,
la moneda que hundimos en el agua,
el jardín nocturno,
los nombres secretos de cariño,
las mañanas de pan tierno y arroz a la cubana,
como un fantasma vagarán por el mundo
sin encontrar reposo.
había perdido el enlace de este poema de Avellana que me dejó sin aliento cuando lo leí y he pinchado al azar, buscándolo, en su archivo.
y al azar he abierto el mes de abril de 2007, justo donde estaba.
me quedo asombrada por la feliz coincidencia.
cuando sucede algo así parecería que un pequeño espíritu benigno vela por nosotros.
cuando sucede algo así parecería que un pequeño espíritu benigno vela por nosotros.