el cielo esta cubierto de nubes.
de pronto se oscurece.
empieza a llover.
la suave lluvia del principio se convierte en un enorme aguacero.
el agua cae por los aleros del tejado con fuerza.
se oyen truenos.
(hay luces que pertenecen a otra época, a otro lugar: la luz de septiembre en marzo o la luz de Galicia en Madrid.)
y, de pronto, lo sé, es una certeza.
esta luz es Shangai, 1930.
4 comentarios:
:-))
Esas certezas tan certeras y tan reveladoras...
Muy buenas las certezas, pero más las cervezas y las cerezas.
;-P
tiene que ser una luz preciosa, a mi me gustan mucho las luces del Norte, siempre brillantes de aguas latentes
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