viernes, 19 de agosto de 2011

elefantes




El elefante lloraba

porque no quería dormir...

-Duerme, elefantito mío,

que la luna te va a oir...

-Papá elefante está cerca,

se oye en el manglar mugir;

duerme, elefantito mío,

que la luna te va a oir...

El elefante lloraba

(¡con un aire de infeliz!)

y alzaba la trompa al viento...

Parecía que en la luna

se limpiaba la nariz...



el elefante que me regaló G. me recordó un poema
que mi madre me recitaba cuando era pequeña.
solo recordaba el principio.

pero google (casi) todo lo sabe.

(el poema es de Adriano del Valle, poeta ultraista
amigo de Pessoa y de Borges.)


5 comentarios:

E dijo...

¿un elefante? uuummm pse... vale! que sea un elefane... ;)

shichimi dijo...

la duda ofende!
:-)

E dijo...

Disculpe Usted la ofensa... pero... ¿oso hormiguero?
Acabo de darme cuenta que concedí "elefane"... un elefante sin "t" de ¿temeridad?, temeridad la suya, al asomarse así al precipicio... ¿tiene nombre?
;)

Marmaduke dijo...

Esto me recuerda el dibujo de la boa abierta y la boa cerrada. Dibujo número 1 y dibujo número 2. Cuando los adultos no comprenden lo que ven ni la ausencia de finalidad, recomiendan a nuestro personaje abandonar la actividad de dibujante y dedicarse a cosas más prácticas. Es así como se hizo piloto comercial. De este modo fue que conoció al impaciente Principito quien le obligó a dibujar un cordero, y una flor y al guardaagujas, etc., etc. Gracias, Antoine.

mgab. dijo...

recojo esa nana para cantársela a mi nieto, es preciosa... gracias Shichimi!