viernes, 16 de mayo de 2008

Retorno

A mi vuelta
ya había nísperos,
volaban los vencejos y cantaba la oropéndola.

El patio es una selva,
y una golondrina dormía en la habitación de invitados (me ha dado pena cerrar la ventana, ¿dónde dormirá ahora?).


Y muy pocas ganas de volver.

2 comentarios:

mgab. dijo...

...pero has vuelto. sin duda como la golondrina, o como los vencejos, o como la ola del mar. la vida es siempre el regreso a algún puerto, no? y en los puertos están las cosas que nos duelen, y también las que nos acojen, incondicionalmente...

besos, Shichimi, y bienvenida!

Unknown dijo...

volver, supongo, es tarea de cobardes. Pero siempre estamos volviendo, hasta que nos acabamos yendo de veras.

Bienvenida al mundo. The show must go on...